Libro que recoge algunos de los textos más memorables de este músico, paradigma de lo que supone ser un adelantado a su tiempo.
Históricamente, además de su producción musical, fue impulsor de cualquier nueva corriente, siendo protector de Débussy primero y después del grupo de Los Seis.
En sus escritos podemos disfrutar de sus posiciones vanguardistas (precursor de la escritura surrealista), y sus irónicas afirmaciones sobre los críticos y las instituciones conservadoras como los conservatorios.
En conjunto, es una miscelánea de breves sentencias, casi aforismos, que sin embargo permite obtener una idea de conjunto sobre su pensamiento.
Muy entretenido y estimulante.
Por cierto, existe un «¿Sabías que…?» sobre Erik Satie