“El primer instrumento fue el corazón. Cuando el hombre se percata de que hay un pulso y ese pulso se acelera y desacelera dependiendo de cómo tú te sientas, ahí comienza la música”.
Así comienza el documental en el que se traza la trayectoria del brillante pianista dominicano Michel Camilo. En él podemos observar a un músico entregado, pasional, enamorado del instrumento, cuidadoso en la construcción de su carrera, realizando interesantes confesiones acerca de la música, el piano y su conexión con la vida.
Se trata de un músico activo en muchos ámbitos, algo que ya estaba presente en cuanto llegó a Nueva York y estudiaba piano clásico en la Julliard, trabajaba en un músical de Broadway e iba después a las jam sessions a los clubes de jazz. Esa multiplicidad de intereses se ha reflejado en su carrera: tríos de piano, discos de piano solo, big band, dúos –como el famoso disco Spain con Tomatito-, bandas sonoras y música clásica –ha compuesto varias obras para piano y orquesta-.
Se repasa su relación con Trueba, con Tomatito, con Paquito d’Rivera, con Fernando Trueba, director de Calle 54, el documental que supuso el despegue mediático en España del latin-jazz, las hermanas Labeque o el director Jesús Lopez Cobos.
