Honeydripper
Película sencilla sin grandes pretensiones que muestra un pequeño pueblo de Alabama en 1950, con los difíciles años de la «Gran Depresión» todavía coleando en la que el dueño de un desastrado club intenta subsistir a pesar de la ausencia de clientes y de la amenaza de restitución del negocio.
Desesperado por el poco público que arrastra la vieja cantante de blues del pueblo, intentará solucionarlo con una idea radical, trayendo a un músico de New Orleans que triunfa en las radios de todo el país. Aparecerá también un joven guitarrista al que no soporta el dueño del bar -Danny Glover- ya que le hace recordar una reyerta de hace años con otro guitarrista que acabó con una muerte que todo el condado conoce pero sobre la cual no se atreve a decir nada nadie.
De fondo, late el tema del racismo, del aprovechamiento por parte de los hombres de negocios y el sheriff de la población afromericana para trabajar en sus campos de algodón, así como la dificultad de salir de ese bucle de pobreza ejemplificado en la hija que quiere estudiar en la capital y para lo cual ahorra con mucho esfuerzo la madre.
La película adolece de intensidad y profundidad en varios momentos pero puede proporcionar un momento agradable si es vista sin muchas pretensiones.
